Libro de Bernardo Quiroz.

Arrierías 97

Manuel T. Bermúdez

Bernardo Quiroz Restrepo es de Caicedonia. Allí realizó estudios de primaria y secundaria. Posteriormente en Bogotá se gradúo en Economía en la universidad INCCA de Colombia.

Pero la vida a veces le impulsa a uno por caminos nuevos y eso es lo que Bernardo ha hecho. Seguir los dictados de su corazón. Decidió volcar su atención a uno de los oficios más difíciles que uno puede enfrentar: escribir un libro.

Bernardo hoy, promociona orgulloso su primer trabajo escrito que tituló El día que decidí morir. En 154 páginas, Quiroz nos pasea, por varios capítulos que pone a consideración de los lectores para que sigan su trasegar de escritor por diferentes historias, por diversos momentos, por situaciones que el lector enfrentará.

Hablé con Bernardo para conocer el porqué y las motivaciones de este momento de su vida que le han convertido en contador de historias. 

¿A qué se debe el título El día que decidí morir?

Tuve un hermano que en muchas ocasiones, durante su vida que duró 85 años, estuvo a punto de morir. Siempre vivió preocupado por salvarse, por no morir. Los aviones lo dejaban y ese avión se caía. Lo invitaban a viajar en un carro y él decía “no me voy en ese carro” y al otro día se daba cuenta de que los que iban en el carro estaban muertos. Ya en el final de su vida, acosado por las dolencias físicas, estuvo muy atento a  no perder ninguna cita médica ni dejar que se pasara la hora de tomar sus medicamentos.

Pero, llegó el momento en el que se le quitaron las ganas de vivir. Cuando llegó el Covid trato de cortarse las venas de las manos para morir. Lo alcanzaron a llevar al hospital, lo intubaron y murió plácidamente.

Eso fue lo que me motivo a escribir pues una persona que luchó tanto por sobrevivir y llegar a viejo, en algún momento decide que tenía que morir.

¿Cuándo resuelve y porqué rendir ese homenaje al hermano?

Mi hermano fue un gran contador de historias. Buen narrador y bohemio. El nos dejó el legado de contar y por eso me vi casi en la obligación de plasmar la historia de la familia a través de él.  Unido a esto me di cuenta de que había que contar también el entorno social que nos había tocado vivir en Caicedonia.

El libro lo inicio contando cómo era Caicedonia antes de 1948 cuando la muerte de Gaitán y después de ese año. Llego hasta un momento histórico de la violencia en Caicedonia el 3 de junio de 1957 cuando matan el jefe de los que en ese entonces se llamaban «pájaros».

La historia de Caicedonia se partió en esa fecha y a la semana siguiente del asesinato de ese personaje que se llamaba Azarías Vargas, muchas familias liberales de Caicedonia emigraron. Desde aquellos días Caicedonia fue conservatizado y sigue siendo conservador. Los liberales que eran las familias ricas y propietarias de las tierras, se tuvieron que desplazar.

Todos los libros que uno escribe le producen algún dolor por la historia que contienen. ¿Cuál fue para usted el momento más difícil en la escritura de este libro?

Para mí lo más difícil ha sido la inexperiencia, la improvisación para escribir, a pesar de que he sido un lector desde muy temprana edad, pero nunca me había decidido a escribir algo. En esta ocasión sentí la necesidad de contar para mi familia la historia y de paso contarles a muchos de mis coterráneos alguna parte de la historia del pueblo. Respecto al momento más difícil no encuentro alguno en especial. Todo se fue concatenando y encontré personas que hicieron de asesores, muy acuciosos que me acicateaban para que escribiera los temas.

Este es un libro primero y último, ¿o piensa que su vida va girar hacia hacer literatura?

Pienso que tengo otros temas y que aquí en el primer libro trato, pero que merecen la pena ampliarlos porque son hechos históricos de la violencia en Caicedonia y de la cual somos los últimos que nos tocó vivir ese episodio y que si no lo escribimos, eso se va a perder de la memoria de las nuevas generaciones de caicedonitas.

¿Qué es para usted la literatura?

Es la panacea de la mente, es la distracción mejor. Toda la vida he leído literatura. He estado pendiente de los libros y mi mente todo el tiempo está en función de leer algo.

¿Cómo han recibido su libro las personas que han tenido la oportunidad de acercarse a él?

Muy asombrados de la publicación. Alguien me dijo “todos hemos querido hacer un libro en la vida y no nos hemos atrevido, Lo felicitamos por hacerlo”.

¿Qué le diría a quienes quieren decidirse a escribir? ¿Cuál es su recomendación?

Siéntese a escribir y los temas irán saliendo y a medida que van saliendo uno los va organizando. La mente irá dictando lo que uno tiene en la cabeza. La escritura es muy intima, muy personal, muy original, pues es lo que uno tiene dentro. Si uno no es escritor encontrará algunas personas que le pueden ayudar a cómo mejorar, pero sino, lo importante es escribir lo que uno quiera y pueda, así desconozca la técnica.

¿Qué experiencia le deja, éste, su primer libro?

Que es muy difícil escribir, organizar los temas, desarrollarlos. Luego vienen la otra parte que es la impresión. Es en general un proceso muy difícil.

¿Algo que desee destacar del libro?

Tuve unos colaboradores muy acertados que me alentaron a seguir la escritura de mi libro ya que desde un principio les pareció novedoso.

¿Dónde se puede adquirir un ejemplar de su libro?

Me pueden llamar al teléfono 311-506-0001. Próximamente hará la presentación del libro para todos mis paisanos.

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Join the discussion One Comment

  • Nelson Guzmán Baena dice:

    Comparto su escrito Manuel Tiberio Bermúdez sobre el libro EL DIA QUE DECIDI MORIR de Bernardo Quiroz Cardona y lo admirable del contenido de sus 154 paginas es que es una nueva forma de contar los hechos relevantes del municipio de Caicedonia a partir de su propia experiencia cognitiva y que brota del interior de su formación profesional y su proyección en el pensar. Es agradable leerlo y creo que es como forma particular de los escritores de esta mi entrañable ciudad.

    Nelson Guzmán Baena
    Presidente Comisión de estudios e investigaciones de la U.I.S. (Unión Internacional de Sindicatos) de P y J (Pensionistas y Jubilados) de la F.S.M. (Federación Sindical Mundial). Calarcá, mayo 25 de 2025.

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