Para: Arrierías 68
Quienes hacemos permanentes recorridos a través de los libros como una forma de llenar espacios y vacíos dentro de nuestro campo profesional, tenemos diferentes maneras de hacerlo. Unos solamente leen y retienen. Otros leen por primera vez y luego estudian, párrafo a párrafo el contenido; otros hacen el ejercicio anterior, pero subrayan o sacan apuntes en notas aparte. Muchos hacen el mismo recorrido, pero rayan sobre el libro o texto. Yo, permanente lector, hago este último ejercicio en forma constante. Leo, estudio y rayo el libro que leo. Son maneras de trabajar un texto tratando de sacar de la lectura y su estudio el mayor conocimiento posible.
Muchas de estas reflexiones quiero publicarlas para que nuestros lectores conozcan y analicen párrafos o expresiones habladas y/o escritas por intelectuales, escritores, periodistas, filósofos, historiadores, en fin, todos aquellos que han enviado mensajes contundentes para la sociedad. Son muchas frases sueltas que escribo entre comillas, citando la fuente o, por no recordar su autor, dejando ese espacio entrecomillado para que nuestros lectores saquen sus propias conclusiones. Creo es un buen ejercicio mental y, por supuesto, académico. Empezamos:
- “Los animales también tienen su espacio en la naturaleza”. Escuchado o leído por ahí.
- “En Colombia informar se ha convertido en una labor insignificante. Ya se sabe lo que se debe decir, cuándo se debe decir, cómo se debe decir y para qué se debe decir. En su gran mayoría, los periodistas carecen de una posición crítica frente al conflicto”.
Fernando Garavito, periodista.
- “La Carta reconoce que aquel que ha cometido actos criminales no puede refugiarse en órdenes superiores ni en la doctrina de que sus crímenes son actos de los Estados”.
Juez Jackson, juez del Tribunal de Nuremberg.
- “Cuatro mil cuatrocientas personas fueron arrojadas vivas al mar, a una hora de vuelo de la costa. Los oficiales de la Armada, la ESMA (Argentina) los tiraban al vacío”.
Fernando Mas, periodista español.
- “las religiones las inventaron los poderosos para distraer el hambre de los humildes. No sé si Dios existe, nadie lo ha comprobado”.
Jorge Zalamea Borda, escritor.
- “Entre el partido liberal colombiano y el partido conservador colombiano no existe ninguna diferencia, ni filosófica, ni táctica, ni moral. No son partidos tradicionales sino espejismos ideológicos tradicionales, trampas electorales, señuelos para atraer al pueblo y hacerlo matar en sangrientas guerras civiles y actualmente es una versión cobarde de este negocio de “señores” que ha dado en llamarse violencia”.
Tulio Bayer, médico colombiano.
- “El libro es, sobre todo, un recipiente donde reposa el tiempo. Una prodigiosa trampa con la que la inteligencia y la sensibilidad humana vencieron esa condición efímera, fluyente, que llevaba la experiencia del vivir hacia la nada del olvido”.
Emilio Lledó, periodista y escritor autor de Los libros y la libertad
- “los crímenes de guerra se definen como el hecho de someter a personas que estén en poder de un bando adversario a mutilaciones físicas o a experimentos médicos o científicos de cualquier tipo que no estén justificados por su tratamiento médico, ni efectuados en interés de esas personas y que causen su muerte o pongan en grave peligro su salud”.
Estatuto de Roma del Tribunal Penal Internacional firmado en 1998.
- “Prepárense para una nueva era en que la escasez mundial de alimentos va a ser cada vez más decisiva en la política global”. Lester Brown, analista e investigador.
- “Los fondos de inversión son la plata que sobra en los países más ricos: esa que las personas no precisan gastar para vivir; su superávit, la basura…, Son la forma en que millones de personas: jubilados, prejubilados, ahorristas de diez a veinte mil dólares, ejecutivos agresivos, inspectores, coimeros, despedidos que cuidan su indemnización, médicos exitosos, comerciantes de calzado de lujo, billonarios del gas siberiano, maestros belgas, putas holandesas, estrellas del rock y todo el resto. Participan del hambre de millones: contribuyen de lejos, como quien no quiere la cosa, en el mecanismo que hace que los precios de la comida suban y más y más personas no puedan pagarlos”.
Martín Caparros en su libro EL HAMBRE
Post scriptum: Este es de mi imaginario y reflexión: “En Colombia a muchos políticos y gobernantes les queda inmensamente grande su propia pequeñez”.
CONTINUARÁ